Con la llegada del verano, las piscinas y playas se llenan de bañistas que disfrutan del buen tiempo. Sin embargo, esta temporada también trae consigo un aumento en los casos de otitis, una infección del oído que afecta especialmente a niños y personas con predisposición a problemas auditivos. Se estima que el 84% de los casos de otitis ocurren durante los meses estivales, principalmente debido a la exposición prolongada al agua y la proliferación de bacterias.
¿Por qué es más común la otitis en verano?
El agua es el principal factor de riesgo en la aparición de la otitis. Al nadar en piscinas, playas o lagos, el agua puede quedar atrapada en el canal auditivo, creando un ambiente húmedo ideal para la proliferación de bacterias y hongos. Si a esto se suma una higiene deficiente o la exposición a aguas contaminadas, el riesgo de infección aumenta considerablemente.
Además, el uso frecuente del aire acondicionado también puede contribuir al desarrollo de la otitis. Los cambios bruscos de temperatura y la reducción de la humedad en el ambiente resecan las vías respiratorias, lo que puede provocar inflamaciones que afecten el oído medio.
Síntomas y tipos de otitis
Los síntomas de la otitis pueden variar en función de su gravedad, pero los más frecuentes incluyen:
✔ Dolor de oído, que puede intensificarse al masticar o bostezar.
✔ Picor y sensación de taponamiento en el oído.
✔ Leve pérdida de audición.
✔ Sensación de humedad o supuración en el oído.
Existen dos tipos principales de otitis:
🔹 Otitis media: afecta al oído medio, ubicado detrás del tímpano. Es más común en niños pequeños y suele estar relacionada con infecciones respiratorias.
🔹 Otitis externa: también conocida como «otitis del nadador», se produce por la inflamación del conducto auditivo externo debido a la entrada de agua o a traumatismos, como el uso de bastoncillos.
Los niños son especialmente vulnerables a padecer otitis en verano, ya que pasan más tiempo en el agua y tienen los conductos auditivos más cortos, lo que facilita la acumulación de humedad y bacterias.
Tratamiento y prevención de la otitis en verano
El tratamiento de la otitis depende del tipo y la gravedad de la infección. En casos leves, suele ser suficiente con aplicar calor seco en la zona afectada o utilizar gotas con propiedades antiinflamatorias. En casos más severos, el médico puede recetar antibióticos en forma de gotas o por vía oral para eliminar la infección.
Algunos remedios naturales que pueden ayudar a aliviar los síntomas incluyen:
✔ Aplicar compresas calientes en la zona del oído.
✔ Utilizar gotas de aceite de ajo, conocido por sus propiedades antibacterianas.
✔ Realizar baños de vapor con eucalipto para reducir la inflamación.
Para prevenir la otitis en verano, es recomendable seguir estos consejos:
✅ Secar bien los oídos con una toalla después de nadar.
✅ Evitar el uso de bastoncillos o introducir objetos en el canal auditivo.
✅ Utilizar tapones de agua o gorros de baño, especialmente en niños.
✅ Evitar nadar en aguas de dudosa calidad o con alta contaminación.
Adoptando estas precauciones, es posible disfrutar del verano sin preocupaciones y mantener una buena salud auditiva durante toda la temporada.